La noche de este 18 de julio, la militancia sandinista se desbordó desde cientos de puntos del país y de la capital, a celebrar el 43 Aniversario del Triunfo de la Revolución Popular Sandinista. Las familias sandinistas disfrutaron de la alegría de vivir en Paz, en vísperas de un año más de Revolución, de nuevos triunfos y de nuevas victorias que conquistamos juntos, todos los días con el gobierno del Pueblo-Presidente.
Desde el espacio de Barricada, aprovechamos esta festividad del pueblo para hacer un recorrido por algunas de estas emblemáticas vigilias y compartir el sentir y el júbilo con el que se reúne el pueblo sandinista.
En el histórico y combativo barrio de San Judas, la militancia sandinista se congregó en una sola voluntad para celebrar el 43/19, pero también para recordar a nuestros Héroes y Mártires. Ahí el militante Ronald Peña expresó:
“Estamos este año celebrando la Revolución. 43 años de triunfos y victorias, venimos año con año del barrio El Pilar. Esto nos traslada directamente a los años de 1978 y 1979, en los que todo el pueblo después de haber pasado muchas penurias, logramos el triunfo aquel 19 de julio, derrocando a la dictadura somocista, es por ello que todavía cada canción nos da esos escalofríos en todo el cuerpo”.
En cada vigilia y punto de reunión, la música revolucionaria acompaña al pueblo, suenan los altos parlantes, grupos musicales amenizan las actividades, imprimiendo una mayor mística a la emoción de los corazones rojinegros.
El compañero Peña, desde la vigilia en San Judas, recordó a las madres de Nuestros Héroes y Mártires, destacando el sacrificio de sus hijos caídos, que no fue en vano: “Nos hace recordar a esas madres y familias, [a esos jóvenes] que dieron sus vidas para que tengamos una patria libre, una patria soberana, en paz, seguridad y bienestar para nuestro pueblo, en beneficio para los niños y niñas, adultos de la tercera edad, los jóvenes que cuentan con atención de salud gratuita, educación técnica que dan las diferentes instituciones por parte de nuestro gran gobierno”.
Y concluyó: “Tenemos entonces mucho que celebrar, mucho que sentir. Ese sentir a nivel nacional que tenemos este y todos los meses, porque nosotros no descansamos, estamos constantemente cambiando. Puedo decir que la paz nos permite trabajar con tranquilidad, porque somos soberanos y libres y no necesitamos el intervencionismo de nadie, somos suficientemente capaces”.
La celebración del triunfo se vive en familia, porque la familia siempre ha sido el centro del modelo de nuestro gobierno revolucionario, el Modelo Cristiano, Socialista y Solidario, así lo expresaron militantes en diferentes vigilias. En San Judas, el joven sandinista Juan Peña explicó: “Estoy aquí hoy celebrando en familia con mis tíos, sobrinos, primos, hermanos y mis padres, todos como diferentes generaciones del sandinismo que han estado trabajando en el partido desde muy jóvenes”. De esa manera los valores revolucionarios se transmiten de generación en generación, lo que garantiza la continuidad del sandinismo.
Asimismo, la compañera María Cela Reyes, desde la misma vigilia expresó: “Yo vengo con mi hija y mis dos bellos nietos, y hoy es un año más de nuestra hermosa Revolución. Nosotros le debemos a Dios y a todos nuestros héroes y mártires el vivir en paz y tranquilidad hoy, yo he inculcado en mis hijas ese legado de conciencia, de lucha, porque debemos dar y ser un ejemplo a seguir. El FSLN es la única organización que se preocupa por los pobres, por el bienestar social, por todos”.
De la misma manera, pero desde la Vigilia en el Barrio San Antonio, la compañera Karen Hurtado, puntualizó por qué celebra en familia un año más de revolución: “Hoy 18 de julio ando con toda mi familia, hoy es un día que recordamos que seguimos mejorando y seguiremos cambiando Nicaragua en muchas cosas, la lucha de todo el pueblo para lograr la liberación, la liberación de la esclavitud, de la represión, de la injusticia. Y estamos y estaremos siempre al frente aunque vengan miles de retos, seguiremos apoyando siempre al Comandante y a nuestros ideales y convicciones”.
De la misma manera, el joven sandinistaChristopher García, desde esta vigilia en San Antonio, manifestó que la continuidad de lucha va quedando en mano de los jóvenes y que no permitirán que nos arrebaten el derecho a la paz:
“Hoy hermanos, se celebra la algarabía que todavía sigue presente desde hace 43 años, donde la mística del triunfo y el combate no se ha perdido, continua viva. Yo como joven y próximamente un viejo entre los mismos jóvenes, estoy claro que debemos darle continuidad a todo lo que estamos haciendo y hacia donde nos dirigimos, no permitiremos que nos arrebaten el desarrollo y la paz que tanto nos ha costado, por eso hoy salimos con alegría, con orgullo de representar estar cuatro grandes letras y esos hermosos colores que son rojo y negro”.
En esa misma lógica, la militante joven sandinista Nadia Pérez, desde la vigilia en el Barrio San Antonio acotó que la revolución ha permitido la participación activa de la mujer y la juventud en el proceso revolucionario: “Celebrar en esta vigilia, significa recordar que un día nosotros estaban atrapados en un sistema que no daba libertad ni a la mujer, ni a los jóvenes de involucrarse en la política. El Día de la Alegría no solo significa haber rompido con la dictadura, sino también la participación activa que ahora tenemos en nuestra revolución”.
Así mismo, la compañera Pérez se refirió al derecho a la educación que hemos conquistado con el retorno del Frente Sandinista al poder: “Recordemos que antes de tener esta celebración, nuestro pueblo no sabía ni leer ni escribir, nos engañaban. Ahora con la Revolución, todos sabemos leer y escribir, la educación ha sido un derecho para todos. Por ejemplo, mi madre me dijo que ella siempre quiso estudiar, pero el sistema injusto no se lo permitió, ahora sí podemos estudiar, ese es un derecho que nos ha reivindicado la Revolución y hay que celebrarlo”.
Nuestro recorrido terminó en la Plaza de la Fe, lugar que ha sido escenario de multitudinarias e históricas congregaciones de sandinistas de todo el país que también se han reunido para celebrar aniversarios de la Revolución. En esta ocasión las familias desde tempranas horas de la noche se reunieron alzando las banderas rojinegra, al son de las músicas revolucionarias y con el calor humano que nos caracteriza, festejando y esperando el reloj marcara la media noche y la llegada otros 19 de julio.
Aquí, la compañera Yesenia Rodríguez, explicó su motivación de celebrar en La Plaza: ¿Qué nos motiva estar aquí en la Plaza año con año?, la celebración de la libertad de nuestra linda Nicaragua. No tenemos más que agradecerles a Dios y a nuestro Comandante la libertad, la soberanía y la Revolución que no ha sido en vano. Esto es una fiesta familiar, es de celebración para ejemplo de todo el mundo […] ¡Viva el Frente Sandinista de Liberación Nacional!
Desde la misma Plaza de la Fe, el joven sandinista Félix Tenorio también comentó sobre el rol protagónico y activo de la Juventud Sandinista en las actuales luchas del pueblo nicaragüense: “Aquí te pones a pensar en lo que decía el Comandante Tomás “habrá Frente Sandinista para rato, hoy, mañana y siempre”, pero para que la continuidad de la lucha no se detenga, significa un compromiso de la juventud, porque la Revolución no fue un hecho histórico de hace 43 años, sino actual, en cada proyecto, en cada una de las actividades que se viene haciendo con el buen gobierno, encabezado por el comandante Daniel Ortega”.
Finalmente, cuando el reloj marcaba casi las doce de la media noche, el joven Israel Morrás López procedente del barrio Edmundo Matamoros, explicó que después de la Vigilia de su barrio se vino a La Plaza a celebrar desde este lugar: “Más que todo es una manera de expresar nuestra mística revolucionaria y nuestro compromiso de frente a lo que es el 43 Aniversario, nunca dejar caer el legado histórico, que no debe perecer. La memoria histórica de los héroes y mártires nos han acompañado y nos han mostrado el camino hacia una sociedad más justa que al final es lo que se busca, que se reivindiquen nuestros derechos sociales y más elementales, la vida, la educación… y a partir de ahí continuar construyendo la historia y la patria”.
Nos dieron las doce de la media noche y en medio de fuegos artificiales ha llegado otro 19 de julio. Concluían así estas vigilias revolucionarias, que se han convertido en una emotiva tradición, para conmemorar y volver a vivir la historia heroica de la lucha sandinista desde cada barrio y comunidad, donde también hay Héroes y Mártires de la revolución. Las familias sandinistas reconocen que estamos viviendo en paz, en un país soberano, porque “el amanecer ya no es una tentación”.
Escrito por Bryan Dávila y Luis Guerrero