La vicepresidenta Rosario Murillo reiteró su saludo a los pueblos originarios, quienes este 9 de agosto conmemoran su día.
«Hoy 9 de agosto saludándonos porque todos aunque todos seamos mestizos venimos de un pueblo originario, hoy es el día de las pueblos originarios y decimos que todos los días son para celebrar nuestras raíces, nuestros orígenes, nuestra culturas, lenguas, modos de vida y nuestra relación reverente con la madre tierra, nuestro amor a la vida en todos sus caminos.» expresó.
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«Todos los días son para denunciar el genocidio, el racismo y el imperialismo con el que han pretendido los colonias de ayer y hoy arrasar con nuestras costumbres, territorios y lugares sagrados que nos pertenecen por derecho propio. Todos los días los denunciamos por lo que son y lo que siguen siendo, para acusarlos y exigirles justicia y reparación para los pueblos originarios del mundo entero que quisieron exterminar, porque esas políticas genocidas y criminales que siempre ha querido acabar con nosotros, los pueblos libres y originarios arrebatándonos lo nuestro porque esa tierra donde llegaron los colonizadores son de los pueblos originarios, esas costumbres, esas tierras nos pertenecen y ellos como siempre han querido acabar con la vida.» enfatizó Murillo.
Y es que los nicaragüenses recuerdan la época colonial como un período caracterizado por una crueldad desmedida hacia los indígenas, reduciéndola notablemente.
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«Aquí estamos los pueblos libres, almas libres, con todos sus elementos de poder que son puntos cardinales en la defensa de nuestra idiosincrasia y derechos. Hoy los pueblos indígenas que compartimos la sangre vibrante, denunciamos y defendemos todo nuestros derechos», indicó.
«Un abrazo a todos nuestros hermanos misquitos, mayagnas, ramas, garífunas, a todos nuestros hermanos en el mundo entero que vibran con la música ancestral del gran espíritu de libertad, justicia y dignidad, el gran espíritu que ilumina como un sol que no declina los caminos, las luchas que deben ser victoriosas de nuestros pueblos», finalizó.