«La Cruzada Nacional de Alfabetización obra del pueblo nicaragüense, fruto de la Revolución,
es un aporte de un infinito valor en la lucha de los pueblos contra la esclavitud;
porque ser analfabeto es ser esclavo»
Comandante Daniel Ortega, 23 de agosto de 2021
El 23 de agosto de 1980, hace 42 años, tras cinco meses de intenso trabajo en el campo y la ciudad, se realizó en Managua el acto del cierre de la Cruzada Nacional de Alfabetización, la hazaña educativa que cambió para siempre Nicaragua.
Los miles de muchachos y muchachas, que cinco meses antes habían marchado a todos los rincones de la patria, volvieron a rendir el último parte de la guerra librada contra la ignorancia, en la Plaza 19 de Julio.
La epopeya que hizo realidad el sueño del Comandante Carlos Fonseca Amador, concluyó éxitosamente un 23 de agosto de 1980, logrando reducir la tasa de analfabetismo 50.35 % al 12.96 %.
Posteriormente, la Organización de Naciones Unidas por la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), reconoció a la Cruzada Nacional de Alfabetización como la mayor movilización de amor para el pueblo, por su carácter masivo, participativo y unitario, otorgándole el premio “Nadezhda Kruskaya”. Además, para el 2007, la Cruzada Nacional de Alfabetización fue inscrita en el Archivo de la “Memoria del Mundo” del mismo organismo.
A 42 años de esa histórica jornada, los aprendizajes de la Cruzada están ahí, siguen siendo la fuerza y el espíritu para que, en este nuevo contexto, las presentes y futuras generaciones de maestros y estudiantes de nuestro país asuman el compromiso de elevar la calidad de la educación, en función del desarrollo humano e integral de la nación.
En las dos etapas del Gobierno Sandinista, la educación ha sido el eje principal para el Frente Sandinista como Gobierno y como partido, garantizado la restitución del derecho a una educación gratuita y de calidad, desde todos los subsistemas educativos.
Compartimos con nuestros lectores, la noticia publicada en la versión impresa de Barricada de aquellos días:
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Nuestro segundo triunfo político
Hemos cumplido con los objetivos de la Cruzada Nacional de Alfabetización. Hemos logrado nuestro segundo triunfo político. Otra vez, el pueblo nicaragüense, la clase obrera y campesina, la juventud, la mujer revolucionaría han hecho posible la victoria sobre el oscurantismo en que nos había sumido la dictadura somocista y su patrocinador: el imperialismo norteamericano.
Después de aquel 19 de Julio, todos volcamos nuestro vigor y energía revolucionaria a la gigantesca tarea de llevar adelante los planes y proyectos de nuestra Organización Vanguardia, el Frente Sandinista de Liberación Nacional. Desde las primeras jornadas de trabajo, en las cuales dábamos forma final a lo largo de la campaña de alfabetización, se vela el entusiasmo de todos los sectores que habíamos aceptado el compromiso revolucionario de plasmar en hechos concretos aquel objetivo delineado por nuestro hermano Comandante en Jefe, Carlos Fonseca «…y también enséñenles a leer».
Y en el cumplimiento del proyecto de la alfabetización fuimos conociendo a nuestros amigos, así como también fuimos conociendo a nuestros enemigos. Vimos como todo el pueblo trabajador desarrollaba al máximo su iniciativa, vanguardia, el FSLN a cumplir con esos miles de hermanos que durante años estuvieron marginados de todo contacto con la cultura. Mediante el trabajo voluntario, las jornadas rojinegras y muchas otras formas de organización se logró dar el impulso sobre el cual se desarrolló la campaña de alfabetización..[…]
El enemigo no dejo de acecharnos un solo momento. Sus maniobras fueron sucias, viles. El saldo fue doloroso: varios hermanos brigadistas murieron. Pero esta Revolución no solo es generosa sino lo suficientemente fuerte como para reservarse, para el momento más oportuno […]
Hoy le podemos decir a nuestros compañeros obreros que se internaron por todo el país a cumplir con la Cruzada de Alfabetización: Hermanos, la mejor distinción que puede haberles dado la Revolución fue la oportunidad histórica de ser un MOA, un Miliciano Obrero de la Alfabetización. Porque, Ia historia de nuestra Revolución, se escribe día a día con hechos concretos, con sacrificios, con ejemplos y es en esta historia donde los batallones de milicianos obreros han puesto su aporte y su ejemplo. Es el triunfo de nuestro gran Ejército Popular de Alfabetización.
A nuestros hermanos nicaragüenses, que aprendieron mucho más que a leer y a escribir, les decimos que la Cruzada de Alfabetización es la primera muestra concreta de como la Revolución está otorgando a todos los nicaragüenses los derechos más elementales que siempre le fueron negados.
El triunfo de nuestra Cruzada también es la mejor respuesta a esos que andan pidiendo elecciones, porque sus ojos no les alcanzan, para ver que el derecho a la alfabetización es la elección de todo el pueblo, es la elección por no ser analfabeta, es la elección por contribuir mejor a la construcción de la Patria Liberada, es la elección de ser conducidos por quienes los condujeron ya en el primero de los triunfos.
A todo el pueblo nicaragüense, que se movilizó para llevar adelante la Cruzada, le pedimos que mantenga en alto su entusiasmo y su energía para que las futuras tareas en tormo a la alfabetización cuenten siempre con esa mística sandinista. Nuestra especial exhortación la mujer nicaragüense para que se haga siempre presente y mantenga particular forma de aporte revolucionario. Del mismo modo llamamos a nuestra heroica juventud para que esté pendiente de las instructivas de nuestra organización.
A los pueblos del mundo que nos dieron su aporte solidario para la realización de nuestra Cruzada, les decimos que los frutos de esta campaña, que el fortalecimiento de nuestra Revolución y su lucha antimperialista es el mejor agradecimiento que podemos retribuirles. Porque la Patria liberada de nuestro General de Hombres Libres, Augusto César Sandino, estará siempre con los brazos abiertos para brindar su solidaridad a la lucha contra todo tipo de explotación, opresión e injusticia, de la mima manera que está presta a recibir la ayuda de los pueblos hermanos y solidarios.
Finalmente, le décimos a nuestra Dirección Nacional: ¡Compañeros, hemos cumplido! Estamos listos para cualquier tarea que la Revolución nos demande, porque donde quiera que nos encontremos sabemos actuar como verdaderos revolucionarios sandinistas, porque los objetivos por los que cayeron nuestros hermanos serán nuestra guía en esta nuestra Revolución antimperialista.
La histórica marcha de nuestro proceso revolucionario cierra hoy un breve capítulo. Se ha ganado una batalla, pero la guerra continúa y continuará mientras exista sobre la faz de la tierra cualquier muestra de explotación imperialista. Por ahora, nuestra trinchera de combate es la producción. La consigna sigue siendo «Levantemos la Producción», porque solo de esta forma consolidaremos nuestra economía sandinista y no tendremos que depender de los préstamos condicionados, porque solo mi podemos atender las necesidades de nuestro pueblo trabajador. Debemos tener presente que debido a las condiciones en que quedo nuestro país después de la dictadura y de la guerra, para poder pedir o reclamar algo, primero tenemos que dar, primero tenemos que trabajar. Adelante, compañeros.