El Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA), llevó a cabo el congreso internacional sobre agroindustria, seguridad alimentaria y diversificación de los sistemas productivos en el cultivo de frijol.
Fueron abordados aspectos sobre la generación de variedades de frijol fortificadas en Latinoamérica y el Caribe haciendo énfasis en las mejoradas que se han impulsado desde el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA), para fortalecer e incrementar la producción nacional.
Nicaragua cuenta con variedades de alta resistencia al cambio climático, las que se han difundido a través de los productores, generando resultados positivos en cuanto al porcentaje de las cosechas y el mejoramiento genético.
Entre las diferentes variedades se encuentran Inta nutritivo rendidor, Inta de apante e Inta nutritivo que son variedades con alto contenido de hierro y zinc, que contribuyen a la mejor nutrición de las familias nicaragüenses.
También se encuentran variedades resistente al cambio climático como Inta rojo, Inta fuerte sequía, Inta nutritivo rendidor, Inta productivo sequía, Inta sequía precos e Inta rojo Jinotega.
Ronaldo Alfredo Calderón, investigador nacional del frijol del INTA, expresó que «las variedades mejoradas han venido hacer un importante aporte en el país, porque el porcentaje que está indirectamente en manos de los productores ha venido a contribuir a disponer de mayor volumen de cantidades de granos comercial, que se ha iniciado a través del programa de mejoramiento genético que el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA), está desarrollando».
Calderón, enfatizó que en este congreso se da a conocer a la población, las variedades que tienen mejor impacto tanto a nivel nacional en las diferentes condiciones de clima.
Pedro Pablo Benavides, director de Transferencia del INTA, refirió que «estamos desarrollando más de 350 mil manzanas de frijol en el país, es decir, más o menos, unos 140 mil productores y productoras, donde contabilizamos más que el 30 por ciento, son mujeres que están manejando está producción».
Armando Sarate Solis, del municipio de Mateare destacó que el área de su siembra de frijol es de 2 manzanas y que el acompañamiento recibido por aporta al mejoramiento del cultivo para obtener mejores rendimientos.
«Muchos de nosotros desconocíamos de tecnología y hoy con las enseñanzas que nos ha llegado al campo, hemos venido mejorando el cultivo y también en la producción, porque hay rendimiento, eso es uno de los grandes logros que hemos tenido a lo largo de estos años», señaló.
Sarate, destacó que, antes sacaba de 20 a 25 quintales de frijol y el año pasado fueron 35, lo que significa que mejoró la producción de frijol.
