Al cumplirse este 17 de Abril los 500 años del inicio de la resistencia indígena nicaragüense contra el imperio invasor, la Asamblea Nacional aprobó la “Ley que declara Héroes Indígenas de Nuestras Luchas Antiimperialistas al Cacique Diriangén y Cacique Nicarao”.
1. Iniciativa de “Ley que declara Héroes Indígenas de Nuestras Luchas Antiimperialistas al Cacique Diriangén y Cacique Nicarao”.
2. Palabras del Compañero Diputado Wilfredo Navarro, Segundo Secretario de la Junta Directiva de la Asamblea Nacional, en la Sesión Plenaria
3. Palabras del Compañero Diputado Edwin Castro, Jefe de Bancada FSLN en la Sesión Plenaria.
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NTERVENCIÓN DEL COMPAÑERO EDWIN CASTRO, JEFE DE BANCADA FSLN EN LA SESIÓN PLENARIA DONDE SE APROBÓ LA “LEY QUE DECLARA HÉROES INDÍGENAS DE NUESTRAS LUCHAS ANTIIMPERIALISTAS AL CACIQUE DIRIANGÉN Y CACIQUE NICARAO”
Hermanos diputados y diputadas, El General de Hombres y Mujeres Libres Augusto C. Sandino nos dice: “Soy nicaragüense y me siento orgulloso de que en mis venas circule, más que cualquiera, la sangre india americana que por atavismo encierra el misterio de ser patriota leal y sincero”.
Con esto recordamos que nuestros antepasados, dueños de estas tierras en este continente que tenía su cultura, sus costumbres, su organización, fueron invadidos por tropas imperialistas que venían a establecer colonias en este territorio.
Territorio que sufrió una ocupación de forma brutal y genocida, una ocupación con la cruz y con la espada, una invasión colonial en la que vinieron a robarse estas tierras en nombre del imperio español, en nombre del imperio inglés, en nombre del imperio holandés y en nombre del imperio portugués.
Y vinieron a este continente a ocupar, a usurpar y masacrar a los pueblos originarios, que resistieron con gallardía, con valor, con heroísmo a estos invasores imperialistas.
En esta región, en este centro del continente, de este nuestro continente, aquí en este territorio hace 500 años exactamente en un día como hoy, estos invasores imperialistas que fiados por Gil González, sufrieron el enfrentamiento y la derrota de dos jefes Caciques, Diriangén y Nicarao que loS expulsaron de estas tierras.
El 5 de abril de 1523, Gil González en el Istmo de Rivas, en la zona de San Jorge, tiene su encuentro con uno de los caciques más importantes de nuestro territorio, uno de los caciques más inteligentes como fue Nicarao.
En un encuentro donde el Cacique Nicarao quiere conocer a los invasores, esto se adentra en el territorio usurpado y robando y el 14 de abril se encuentran con otro cacique “el señor de los dirianes” Diriangén.
Y le dice Gil González a Diriangén que tiene que someterse a la cruz, que tiene que bautizarse. Diriangén le pide tres días y Gil González sigue avanzando, sigue robando, sigue llevándose las riquezas de estas tierras y el 17 de abril un día como hoy hace 500 años, Diriangén se enfrenta a Gil González y lo hace retroceder y cuando está retrocediendo hacia el Istmo de Rivas, el Cacique Nicarao con sus tropas, termina de expulsarlo del territorio nacional.
Esa es la gallardía que tenemos en nuestro ADN contra los imperios, es ese el ejemplo que tenemos de lucha contra el coloniaje, eso lo tenemos en nuestro ADN, en nuestro ser nicaragüense y como decía el General Sandino “Corre en nuestra sangre la sangre india, que es la esencia de ser patriota, de ser leal y ser sincero”.
Eso significa ser antimperialista, eso significa ser anticolonialista, luchar por nuestra cultura, luchar por nuestra paz, luchar por nuestro desarrollo.
Esos invasores que vinieron a nuestra América, a nuestra Nicaragua, a nuestros territorios, a nuestro continentes, vinieron a ocupar, a robar, a terminar con la cultura de nuestros pueblos indígenas, a terminar con el desarrollo de nuestros pueblos originarios y se destaca la resistencia en estos territoritos, no solo de Nicarao y de Diriangén que hoy honramos, que hoy recordamos y hoy asumimos como nuestros Héroes Indígenas de nuestras luchas antimperialistas.
También ese ejemplo lo tenemos en una serie de caciques y voy a mencionar solo algunos como: Adiact, el último cacique de Sutiaba, que luchó hasta su muerte contra la invasión española, contra el imperio español; Agateyte en la zona de occidente, en Chinandega, Tenderí, Chontal, Nicoya, Taisigüe, Yarrinze, entre tantos otros, que nos enorgullecen y nos hacen sentir ese atavismo que llevamos en nuestra sangre indígena, en nuestras luchas antiimperialistas hasta el día de hoy
Por eso es que hoy a 500 años honramos, asumimos y recordamos esta gesta, esta victoria de resistencia, mantener en alto nuestra identidad de ser nicaragüense, por ser nicaragüense consecuentemente ser antiimperialista.
Por eso compañeros y compañeras yo les pido a cada uno de nosotros que asumamos el día de hoy este compromiso, esta Iniciativa, esta Declaración de Héroes indígenas de lucha antimperialistas, que hoy honramos con este reconocimiento a los Caciques Diriangén y Nicarao.
Lo menos que podemos hacer es votar en esta Asamblea Nacional es votar unánimemente en reconocimiento de nuestros orígenes de nuestra Nicaragua, la lucha por la libertad, la justicia y soberanía son elementos esenciales en las personalidades de ambos caciques.
Por eso estamos convencidos de que en esta Asamblea Nacional hay hombres y mujeres que aman a Nicaragua, que aman la paz y que por eso votaremos unánimemente esta Declaración, esta Ley que hoy se nos presenta.
Muchas gracias!
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INTERVENCIÓN DEL COMPAÑERO WILFREDO NAVARRO, SEGUNDO SECRETARIO ASAMBLEA NACIONAL EN LA SESIÓN PLENARIA DONDE SE APROBÓ LA “LEY QUE DECLARA HÉROES INDÍGENAS DE NUESTRAS LUCHAS ANTIIMPERIALISTAS AL CACIQUE DIRIANGÉN Y CACIQUE NICARAO”
Creo que este es el mejor momento en este año y en la historia de nuestro país, para hacer un reconocimiento a los Caciques Diriangén y Nicarao, porque históricamente en la historia que nos enseñaron, disminuyeron el rol y el papel que jugaron estos guerreros nicaragüenses.
Creo que hay que rendir honor al que honor merece y más cuando en los tiempos pasados de una manera voluntaria, se trató de ocultar la gesta de estos dos grandes personajes americanos, porque su dimensión trasciende la provincia de Nicaragua, trasciende en su momento en que no éramos ni provincia, trasciende pera ya estaba en desarrollo ese espíritu de amor a la libertad y antimperialismo de los habitantes de nuestra América.
La historia que nos enseñaron a todos nosotros, es una historia mentirosa e hipócrita porque fue escrita por los vencedores, cuando estábamos en secundaria, nos enseñaron que los españoles y los europeos vinieron a liberarnos, a enseñarnos, a darnos la luz, a darnos un idioma, a darnos una cultura, porque los habitantes de América éramos unos salvajes.
Cuando leemos sobre Diriangén y Nicarao nos enseñaban, que cuando vinieron los españoles, Diriangén con su gente y Nicarao salieron en fila a ofrecer chompipes, ofrecer oro etc.
Nada más mentiroso, nada nos trajeron los españoles ni los europeos que nos vinieran a dar conocimientos del que teníamos, los pueblos de América tenían más cultura que los propios europeos, pero cuando se habla en la historia, se dice que los españoles y los europeos vinieron a redimir a América, que nos trajeron cultura, que nos trajeron conocimientos.
No, los españoles los que nos trajeron fue violencia, saqueo, enfermedades, epidemias, nos trajeron un robo desmedido de nuestras riquezas, y a eso con una premonición, Nicarao y Diriangén se opusieron.
Nuestros ancestros no recibieron a los españoles con flores, defendieron nuestro territorio y defendieron nuestros conocimientos y nuestra cultura.
Los españoles nos vinieron a imponer una cruz a sangre y fuego, cambiando las religiones de nuestros ancestros, cambiando nuestro lenguaje, cambiando nuestra cultura, por eso hoy más que nunca tenemos que decir, que no tenemos nada que agradecer a los españoles y a los europeos porque lo que vinieron a hacer fue a robar y a saquear Nicaragua y América. Las riquezas están cimentadas sobre el genocidio de los pueblos americanos.
Y la historia está ahí, Canadá, es una barbarie lo que hicieron los ingleses, los europeos, los franceses, quisieron cambiarle la cultura a los pueblos indígenas desde niños y los metieron en lugares donde los niños morían, más de 20 mil niños murieron, porque querían hacer un genocidio con el pueblo indígena canadiense y lo mismo pasó en los EEUU y asesinaron a los indígenas y los esclavizaron.
¿Qué vamos a agradecer nosotros a Europa? si lo que nos trajeron fue muerte y sangre, pero ahora están repitiendo nuevamente esa actitud. Pero ahora los instrumentos y herramientas son diferentes, no usan a perros que asesinen a indígenas como lo hicieron en León viejo, ahora lo hacen a través de sanciones para someter a nuestros pueblos.
Hoy que estamos haciendo este reconocimiento a Diriangén y a Nicarao, estamos haciendo un reconocimiento a la lucha histórica del pueblo nicaragüense contra el imperio, contra el coloniaje, contra la esclavitud.
Hoy más que nunca, además de votar por decláralos Héroes Indígenas de nuestra lucha antimperialista, además de votar por esta Ley, debemos de renovar nuestro compromiso, con estos representantes de nuestros pueblos indígenas para seguir en la lucha de mantener a nuestra patria libre y soberana e independiente.
No podemos retroceder. Nicaragua con el ejemplo de Diriangén y Nicarao mantienen los estandartes de lucha porque nuestra nación sea libre y soberana.
En las casi puertas del inicio de una noche oscura que se vino sobre Nicaragua, es una noche oscura, no muy clara que provocó dolor y lágrima en los nicaragüenses por la actitud de malos hijos, prohijados del imperio, hoy más que nunca tenemos que renovar nuestros votos de voluntad para impulsar esos cambios y como decía el presidente de la República de Nicaragua “No nos descuidemos, hay que estar con un ojo abierto y el otro cerrado, porque los enemigos de la paz, los enemigos de la Nicaragua libre y soberana, no descansan y tienen apoyo poderosos”.
Por ello en esta sesión comprometámonos a seguir manteniendo esa visión, de que aquí no podemos permitirnos que limiten la voluntad del pueblo nicaragüense.
Nicaragua está hecha de vigor y de gloria, pero ese vigor y gloria se la da el pueblo de Nicaragua y ese pueblo somos nosotros unidos en la defensa de la soberanía nacional.
¡Vivan los caciques Nicarao y Diriangén ¡