Barricada

Hermandad y orgullo centran la entrega de la Antorcha de la Unión Centroamericana a Nicaragua

La República de Honduras entregó a Nicaragua la Antorcha de la Unión Centroamericana durante un acto cívico celebrado en el puesto fronterizo de Las Manos.

La Tea Centroamericana recorrerá Nicaragua hasta el 13 de septiembre, fecha en la que será entregada a la República de Costa Rica como parte de las celebraciones conmemorativas de la independencia.

El evento estuvo encabezado por la alcaldesa de Ocotal, Xiomara Tercero, quien recibió la antorcha de manos de su homóloga del municipio de El Paraíso en Honduras, Ligia Isabel Laínez.

Posteriormente, la antorcha fue entregada al estudiante con excelencia académica Ángel Ignacio González Reyes, de noveno grado en el Instituto Nacional de Leonardo Matute. González Reyes ha sido destacado no solo por su desempeño académico, sino también como protagonista en las Consejerías de las Comunidades Educativas y campeón en taekwondo.

Durante el acto, Kimberling Loanis Espinoza Sánchez y Freyddel Dinoska Cruz Torres fueron los encargados de escoltar tanto el pabellón nacional como la bandera de la Federación de Estudiantes de Secundaria (FES), en una ceremonia en la que participaron autoridades educativas, municipales y políticas, junto a estudiantes destacados de ambos países.

Ligia Isabel Laínez, alcaldesa de El Paraíso, subrayó la importancia de la antorcha como símbolo de unidad y paz.

La antorcha recorrerá un total de 503 kilómetros en Nicaragua, y llegará a Managua el 12 de septiembre, donde será recibida por el presidente Daniel Ortega.

Como parte de la jornada, se realizaron intercambios simbólicos entre estudiantes de ambos países, en señal de fraternidad. Estudiantes como Cristina Naza Montalván, de Nicaragua, y Jafet Enmanuel Zúñiga Palma, de Honduras, quienes se destacaron en competencias académicas y culturales, intercambiaron obsequios y placas, fortaleciendo los lazos de unidad entre los jóvenes centroamericanos.

Este acto celebra la independencia y refuerza los valores compartidos entre los pueblos de la región, destacando la importancia de la educación, la paz y la hermandad en la construcción de un futuro próspero para Centroamérica.