En Nicaragua, la gestión de riesgos ante fenómenos naturales ha dado un giro radical desde el 2007, pasando de un enfoque reactivo a uno preventivo, gracias al liderazgo del Gobierno Sandinista y el trabajo articulado del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED). Durante el programa «Desde el Parlamento», el Director de Capacitación y Respuesta del SINAPRED, Norman Mora, destacó los avances alcanzados en la protección de la vida frente a amenazas como huracanes, lluvias intensas, terremotos, deslizamientos, maremotos y los impactos del cambio climático. “Hemos dejado atrás el enfoque emergencista de los gobiernos neoliberales, donde solo se actuaba después del desastre. Hoy hablamos de preparación, educación y organización desde la familia hasta el territorio”, expresó Mora.
El funcionario subrayó que una de las mayores fortalezas del modelo nicaragüense es la organización comunitaria: “En cada barrio y comarca hay compañeros y compañeras pendientes de la población, informando en tiempo real cualquier riesgo. Ese es el éxito: tener una red de alerta comunitaria que permite respuestas rápidas y efectivas”. Mora también enfatizó el esfuerzo sostenido en capacitación: “Tenemos un plan nacional que forma a miles de brigadistas en primeros auxilios, evacuación, combate de incendios y rescate básico. Además, trabajamos con herramientas tecnológicas como alertas sísmicas en dispositivos móviles y sirenas automáticas ante tsunamis”.
Uno de los logros mencionados fue la preparación ante los huracanes Eta e Iota en 2020: “Cuando Eta impactó, ya teníamos 88 toneladas de recursos en el sitio; cuando llegó Iota, 135 toneladas más estaban listas. La organización permitió que, al día siguiente del impacto, los mercados y bancos abrieran en condiciones normales”.
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El SINAPRED también avanza en el desarrollo del sistema SINAREM, que permitirá una gestión más rápida y eficaz de emergencias mediante la recopilación y análisis en tiempo real de información territorial. Finalmente, Mora afirmó: “Este es un gobierno que demuestra compromiso real con la vida. Lo que hacemos no es solo una estrategia técnica, es una forma de vida orientada a proteger a nuestro pueblo. Y eso solo lo puede hacer un gobierno consciente, responsable y revolucionario”. Concluyó haciendo un llamado a las familias a continuar organizándose, participando en los ejercicios nacionales y apropiándose del conocimiento que salva vidas.
