Un 7 de julio de 1981, hace exactamente 46 años, los combatientes del Frente Occidental “Rigoberto López Pérez” protagonizaron uno de los hechos más relevantes de la Ofensiva Final contra la dictadura: la toma del Fortín de Acosasco, último reducto de la Guardia Nacional en León. Este hecho histórico representó un duro golpe al régimen somocista y allanó el camino hacia la victoria popular que se concretaría el 19 de julio de 1979.
Una insurrección nacional
En 1978, el Frente Sandinista de Liberación Nacional, reconocido como Vanguardia del pueblo nicaragüense, intensificó su lucha con acciones que marcaron la historia nacional: las huelgas, los paros cívicos, la heroica insurrección indígena de Monimbó, y la audaz “Operación Chanchera” con la toma del Palacio Nacional el 22 de agosto. Cada acción socavaba el poder del régimen somocista y preparaba el terreno para la insurrección final.
Ya para el 4 de junio de 1979, el FSLN convocó a la huelga general. El 10 de junio, la mitad de Managua estaba en control de las fuerzas populares. Simultáneamente, en todo el país se activaban columnas guerrilleras: en Estelí, Matagalpa, Jinotega, Chinandega, León, Diriamba, Jinotepe, Masaya. Jóvenes combatientes y pobladores levantaban barricadas. Nicaragua entera se transformó en un solo frente insurreccional.
El asalto a Acosasco
En León, luego de intensos combates, el 20 de junio, el Frente Occidental logró tomar el Comando de la Guardia Nacional. Sin embargo, resistía un bastión: el Fortín de Acosasco. Durante diez días de feroz asedio, los combatientes sandinistas lograron aislar el fortín, cortando el apoyo aéreo y terrestre. El 7 de julio de 1979, finalmente, fue tomado por asalto, marcando el colapso definitivo del poder somocista en León.
El Fortín era dirigido por el Mayor General Gonzalo Evertz, conocido como “Vulcano”, y constituía un símbolo de la represión militar. Su caída abrió paso para que las columnas sandinistas avanzaran hacia La Paz Centro, Nagarote y, finalmente, Managua.
Honor a nuestros héroes
La toma del Fortín de Acosasco es recordada como una gesta heroica, protagonizada por hombres y mujeres valientes que entregaron su vida por la libertad. Hoy, el pueblo nicaragüense rinde homenaje a esos mártires que hicieron posible la Revolución.
“¡Honor y Gloria a la gesta heroica de la toma del Fortín de Acosasco!”, expresa la memoria colectiva de la nación.
Fuente:
Dr. Danilo Aguirre Solís. Reportaje histórico-periodístico de la Guerra de Liberación
Archivo histórico de Barricada, testimonios de combatientes y fuentes del FSLN.
