El Plan Nacional de Prevención de Incendios Forestales y Agropecuarios 2022, que está implementando Nicaragua, desde este 27 de enero, va dirigido a la protección de los recursos naturales y a la sensibilización de las familias con relación a los efectos del cambio climático.
El plan también contempla la reducción de las incidencias en bosques, áreas protegidas y patrimonios naturales; el fortalecimiento de las brigadas comunitarias y municipales, así como, crear mayor capacidad en el rescate de los valores en el cuido de la madre tierra.
Indiana Fuentes, codirectora del Instituto Nacional Forestal (INAFOR), dijo que alrededor de 15 años, el Gobierno Sandinista ha dirigido sus políticas a fortalecer valores de las familias en el cuido de la madre tierra y las capacidades de alerta temprana, con el fin de prevenir y controlar los incendios forestales y agropecuarios.
Fuentes mencionó que en el 2021 se logró articular con las familias, para reducir sustancialmente los incendios, ejemplificando con Chinandega, donde se produjo dos incidencias, nada más.
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«A nivel nacional logramos reducir 80 por ciento, eso es importante, gracias al trabajo articulado de las familias», destacó.
Señaló que en estos años se ha obtenido una participación masivas de las familias, «estamos hablando de más de 500 mil personas dirigiéndose al mensaje de llevar a otros, la sensibilización y cambiando de esos patrones que provocan estas incidencias».
Esfuerzo mancomunado garantiza exitosos resultados
El doctor Guillermo González, ministro-director del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED) resaltó que el esfuerzo mancomunado de las instituciones y pueblo de Nicaragua, en los últimos 15 años, ha dado como resultado la reducción de incendios forestales y agropecuario, tanto en cantidad y extensión.
Especificó que el plan contiene un fuerte componente para el cuido que se tiene que hacer de los recursos naturales, principalmente en el campo de los bosques.
«Tenemos que ir fortaleciendo nuestras conciencias y valores en el sentido de cuidar. La madre tierra no solo es nuestra casa común, sino que, es la que nos permite desarrollarnos y tenemos que cuidarla y restaurarle aquellos recursos que le tomamos prestados, por eso es importante que lo comprendamos y lo tengan presente las nuevas generaciones», remarcó y fue enfático al decir que reducir los incendios forestales, es aportar a las medidas de prevención cuando viene las inundaciones.
«Nuestro presidente le da tanta importancia a este plan que ha designado al ejército de Nicaragua, para que este al frente y conduzca las acciones», aseveró.
Destacada participación del Ejército de Nicaragua
El General de Brigada Rogelio Enrique Flores Ortiz, jefe del estado Mayor de la Defensa Civil del Ejército de Nicaragua, dijo que se estará aportando en este esfuerzo de nación con un importa tropas de unidades militares, tales como, la Fuerza Naval, Fuerza Aérea, Unidad de Rescate, Batallón Ecológico y Destacamentos Antidesastres Territoriales.
«Nos estaremos involucrando en todas las etapas del plan contra incendios, aprobado por el Comandante Daniel Ortega. Desde la preparación, la planificación, prevención hasta el control y respuesta, con el fin de que la contribución institucional, permita de manera cohesionada con el resto de las instituciones, implementar todas las misiones y tareas necesarias para la reducción de incendios», explicó, el General de Brigada, Flores.
Aseguró que se concentrarán los esfuerzos principales de tropas en las 74 áreas protegidas que se tienen establecidas por decretos y leyes, sin descuidar los lugares donde se produzcan estos eventos y pongan en riesgo la vida de las personas.
«El Ejército de Nicaragua también mantendrá contacto permanente con la Comisión Nacional de Incendios Forestales y la Comisión Técnica, a fin de evaluar el paso a paso de este plan, con el objetivo de tomar las mejores decisiones para salvaguardar la vida humana y garantizar las mejores opciones de seguridad en las comunidades», finalizó.
Colaboración de Ixchel Espinoza / Chinandega.
