Por: Freddy Arana
Con la conciencia abrigada en nuestra historia, desde el Centro Cultural Julián Roque, la Juventud Sandinista 19 de Julio, llena de alegría y determinación realizó entrega floral en conmemoración del 49 aniversario del paso a la inmortalidad de nuestro héroe el Comandante Julián.
Como parte de esta actividad hubo una presentación cultural y deportiva donde los jóvenes destacaron sus habilidades en Karate.
Nuestra Juventud nicaragüense, ha demostrado su voluntad política por preservar la memoria histórica de todos nuestros héroes, fomentaron la participación activa de todos los jóvenes en los espacios gratuitos impulsados por nuestro buen Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional.
El Secretario General del Ministerio de la Juventud, el Cro. Alex Galeano, destacó la historia del Comandante Julián y resaltó que en una ocasión declaró estar hastiado de todo el sufrimiento de su pueblo a causa de la dictadura Somocista, manifestando que el acceso a la educación tenía que ser un derecho para todo el pueblo, no para unos pocos.
El Comandante Julián nació el 2 de julio de 1946, en el barrio la Suspensión, hoy conocido como barrio El Redentor, fue el hijo mayor de 12 hermanos, en 1959 incursionó en las aulas del Instituto Ramírez Goyena, donde hizo sus dos primeros años de secundaria, sobresaliendo siempre como el mejor alumno de su grado y buen deportista, formó parte de los movimientos estudiantiles de la época.
En 1966, cuando cursaba el segundo año de Administración de Empresas en la UCA, se involucró de manera activa y decidida en la lucha antisomocista que inició en el Estadio Nacional, donde la consigna «¡No más Somoza!» se enarbolaba con fuerza.
Como consecuencia de su participación, fue capturado y encarcelado en el temido «hormiguero» junto a doce compañeros más, entre los que se encontraban figuras como Casimiro Sotelo, Michelle Naglis, Dionisio Marenco, Jacinto Suarez, Ernesto Leal, María Terán, Luis Medal y Federico Cerda.
El 21 de septiembre de 1970, el Comandante cayó en manos de la Guardia Somocista, al ser capturado en la casa de seguridad del sastre Mauricio González, ubicada en Monseñor Lezcano, junto con Leopoldo Rivas Alfaro y Salvador Loza Talavera.
Ante esta afrenta, la Dirección Nacional del FSLN ya ideaba una respuesta contundente, materializada el 27 de diciembre de 1974. El comando guerrillero «Juan José Quezada» ejecutó una audaz toma de la residencia de José María Castillo, en el Reparto Los Robles, con esta acción se logró la liberación de importantes miembros del FSLN, entre ellos el Comandante Julián, tras su liberación partieron a la hermana república de Cuba como exiliados políticos, sin renunciar jamás a su firme ideología de lucha por la liberación de su patria.
A finales de 1975, el Comandante Julián regresó clandestinamente a Nicaragua, internándose valientemente en las montañas del Norte con la misión de preparar el terreno para el retorno del fundador del FSLN, Carlos Fonseca Amador.
El 30 de abril de 1976, mientras comandaba una escuadra del FSLN, Julián Roque Cuadra fue detectado por las fuerzas somocistas en la región de Zelaya Central. Fue alcanzado por las balas enemigas, cayendo heroicamente en defensa de sus ideales.
Con su lucha, el Comandante Julián es un referente de dignidad y soberanía nacional para nuestra juventud de todos los tiempos, su legado perdurará en la memoria de los jóvenes, comprometidos con los ideales y principios de lucha del Frente Sandinista de Liberación Nacional.
Los Copresidentes Comandante Daniel Ortega y Compañera Rosario Murillo, han hecho a la Juventud participe de su propia historia, restituyendo los derechos a la población nicaragüense del acceso gratuito y de calidad a todos los niveles de la educación.
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