En un discurso lleno de memoria histórica y fervor patriótico, el CoPresidente Comandante Daniel Ortega Saavedra destacó este 19 de julio, en el 46 aniversario del Triunfo de la Revolución Popular Sandinista, el largo camino de resistencia del pueblo nicaragüense ante siglos de dominación colonial e intervenciones extranjeras.
Recordando que Nicaragua y Centroamérica se independizaron de España en 1821, el Comandante resaltó que, a pesar de más de dos siglos de dominación, sobrevivieron las lenguas y raíces de los pueblos originarios, que hoy son revitalizadas y fortalecidas gracias al modelo educativo de la Revolución. “Ahora se imparten clases en español y en miskitu, ramaquí y otras lenguas originarias”, expresó, destacando además los proyectos de educación superior en comunidades que durante siglos estuvieron en el olvido.
El CoPresidente rememoró también la historia de la llamada “Ruta del Tránsito”, por donde transitaban miles de estadounidenses rumbo a California durante la fiebre del oro, un corredor controlado por empresas navieras de Estados Unidos. En medio de disputas entre estas empresas, llegaron mercenarios yanquis a Nicaragua en 1855, encabezados por William Walker, quien incluso fue declarado presidente del país con apoyo del Departamento de Estado de Estados Unidos. “¿Cuánta gente sabrá que Nicaragua tuvo un presidente yanqui?”, preguntó el Comandante, al tiempo que destacó la gesta heroica de los indios flecheros de Matagalpa, José Dolores Estrada, y Andrés Castro, quienes con piedras, flechas y dignidad derrotaron al invasor yanqui en la histórica Batalla de San Jacinto.
Asimismo, el Comandante recordó las múltiples invasiones de ingleses, alemanes y estadounidenses, destacando que desde el siglo XIX hasta la década de 1980, el pueblo nicaragüense se ha levantado una y otra vez en defensa de su soberanía. Con datos comparativos, subrayó el contraste entre la población y el poderío de Estados Unidos frente a una Nicaragua pequeña, pero con un corazón grande y rebelde. En 1855, dijo, Nicaragua tenía 214 mil habitantes, mientras Estados Unidos ya contaba con 27 millones. En 1926, durante la gesta de Augusto C. Sandino, Nicaragua apenas superaba el medio millón de habitantes frente a los 117 millones del país norteamericano.
“Ni con aviones ni con mercenarios pudieron vencer a Sandino. No pudieron ni podrán”, afirmó contundente el líder sandinista. De igual forma, recordó la agresión de los años 80, cuando Estados Unidos entrenó y armó a la contrarrevolución. “Y no pudieron derrotar al Ejército Popular Sandinista ni a los cachorros que defendieron la patria”, señaló.
El Comandante Daniel Ortega cerró su intervención dirigiéndose a las nuevas generaciones:
“Queridos jóvenes, tenemos paz. Pero eso no significa que el enemigo descanse. Siempre está conspirando. Por eso, debemos seguir defendiendo la soberanía, la dignidad y la Revolución, como lo han hecho nuestros héroes a lo largo de la historia”.
