El 5 de Julio de 2018, hace 5 años, en el marco del fallido intento de golpe de estado, fue torturado y asesinado por grupos terroristas de la derecha golpista el compañero Roberto José Castillo Cruz en los tranques del municipio de Jinotepe, de donde era originario. Hoy recordamos su ejemplo de militancia inclaudicable, compartiendo la semblanza escrita por su hija, Kenia Castillo.
Roberto José Castillo Cruz, jinotepino, nació el 11 de junio de 1954 en Jinotepe, Carazo. Sus padres, Carlos Castillo y Jacinta Cruz. Casado con Martha Rosales Cortez, tuvo cuatro hijos: Ferson Santiago, Anielka, ambos ingenieros, Kenia, doctora, y Christopher Roberto castillo (Q.E.P.D.), estudiante de Ingeniería, asesinado en el marco del fallido intento de golpe de estado el 24 de junio de 2018.
Se integró a la lucha somocista como guerrillero en 1972, cuando tenía 18 años, con otro grupo de chavalos del barrio San Felipe, entre ellos estaba Daniel Martin Busto, asesinado por la guardia genocida el 6 de julio 1979, en el barrio San Felipe. Ese día fueron interceptados por la guardia y Roberto Castillo es uno de los sobrevivientes, junto con otros compañeros.
Integró los Comités de Defensa Sandinista. En la década de los ochenta, cumplió el Servicio Militar Patriótico, trabajó en el Ministerio de Comercio Interior (MICOIN). Posteriormente integró el Consejo del Poder Ciudadano (CPC) del Barrio Ana Virgen Noble. En ese mismo también, asumió la responsabilidad de Secretario Político del Consejo de Liderazgo Sandinista, CLS.
En el año 2018, en el marco del fallido intento de golpe de estado, grupos delincuenciales, financiados por la derecha golpista, como el Movimiento 19 de abril y FECUN, levantaron lista de militantes del Frente Sandinista que ellos consideraban personalidades muy reconocidas y apreciadas ante el pueblo. También incluyeron nombres de militantes que tenían responsabilidad política en sus barrios y territorios. En esta lista, se encontraban los nombres de Roberto Castillo Cruz, Ferson Castillo Rosales, Anielka Castillo Rosales, los cuales fueron amenazado a través de las redes sociales, secuestrados, y golpeados por los grupos terroristas ante mencionados.
En su sed de odio, dichos grupos asesinaron a su hijo menor de tan solo 21 años, Christopher Castillo Rosales, estudiante del 3 año de Ingeniera Civil en la UNI, un 24 de junio del 2018 y 10 días después el 5 de Julio 2018, Roberto Castillo Cruz fue capturado por sujetos pertenecientes al grupo golpista de FECUN, quienes tenían además varios tranques en el barrio Cruz de Guadalupe.
En uno de esos tranques, fue torturado y después fue entregado al Movimiento 19 abril, a los dirigentes del tranque San José(tristemente conocido como El tranque de la muerte). Estos delincuentes, al llegar al lugar, pidieron que llamara a su hijo, Ferson Castillo, para que lo llegara a traer. Roberto se negó y procedieron a golpearlo y dispararle en las piernas y abdomen. Una vez perpetrado el homicidio, estos asesinos a sueldo y demás delincuentes los subieron a la tina de una camioneta azul que fue robada y anduvieron el cuerpo de Roberto Castillo por la Colonia Santiago, luego por el barrio San Juan y San José. Después de andar el cuerpo por dos horas, fueron a botarlo a un basurero ilegal, detrás de Herty Landia. Tiempo después, vecinos aledaños al lugar se dirigieron a la casa de habitación de Don Roberto y dieron parte a Doña Martha Rosales, su compañera de toda la vida. Así nuevamente la desgracia, el luto, el dolor y la impotencia golpearon duramente a toda la familia Castillo-Rosales.
Mi padre era un hombre de principios y valores éticos y revolucionarios hasta el último minuto de su vida. Procedía de una familia muy pobre, al igual que muchos que dieron su vida por cambiar la historia de nuestro pueblo.
De niños nos contaba por qué pertenecía al frente Sandinista, por qué seguiría trabajando en función del partido de las cuatro letras FSLN y por qué se integró al Servicio Militar Patriótico.
Nunca le gustaron las injusticias, las violaciones que vivió el pueblo en el tiempo de Somoza. Nos comentaba cómo, al triunfar el FSLN, se restituyó el derecho a la salud y educación gratuita, el derecho a trabajar y obtener un salario digno y la inclusión de la mujer en la sociedad.
Mi padre recordaba que, durante la dictadura somocista, el analfabetismo era lo más común entre la clase pobre. La sociedad nicaragüense vivía sumisa en la injusticia social, sometida al abuso de poder, torturas y asesinatos perpetrados por la Guardia Somocista. Mi padre estaba claro que la única forma de cambiar la historia era sacando a Somoza del poder, razón por la cual aportó su granito de arena en la lucha por la libertad y se dedicó a batallar y luchar cada día por el bien común.
Roberto Castillo era muy conocido por la gente humilde del departamento de Carazo, pues siempre estuvo dispuesto a ayudar a quien más lo necesitaba. No era un adinerado acaudalado, pero tenía el corazón más noble del mundo, razón suficiente para despojarse de lo poco que tenía para ayudar al más necesitado, brindando su apoyo y acompañamiento incondicional. Era la voz del que no podía ser escuchado, las piernas del que no podía andar, fue simplemente un cultivador de Amor, de Paz.
Aún en el momento más duro de su vida, en el marco del fallido intento de golpe de estado, hundido en el dolor de un padre por el asesinato de su hijo a sangre fría, aun así lo único que pedía era paz para todos los y las nicaragüenses.
Completamente identificado con el proceso revolucionario, liderado por el Comandante Daniel y la Compañera Rosario, repetía continuamente esta frase: “Nosotros iremos hacia el sol de la libertad o hacia la muerte y si morimos, nuestra causa seguirá viviendo y otros nos seguirán”.
Hoy más que nunca estoy segura que la sangre inocente de mi padre Roberto Castillo Cruz y mi hermano Christopher Castillo Rosales no se derramó en vano y tampoco la de muchos hermanos nicaragüenses víctimas de esos terroristas, con esa sangre reconquistamos nuestra libertad y hoy labra el camino con un sol que no declina, hacia un futuro mejor.
Vivan Nuestros Héroes de la Paz!!!
Roberto Castillo Cruz: Presente!! Presente!! Presente!!
Tu legado continuará!!!
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Escrito por: Kenia Castillo Rosales