El 19 de julio de 1979, el pueblo de Nicaragua, vanguardizado por el FSLN, daba fin, con su lucha heroica, a la dictadura somocista, una de las más sangrientas de Latinoamérica.
Años de invasión, represión y miseria
En 1909, Nicaragua fue invadida por los Estados Unidos, que derrocaron el gobierno liberal del General José Santos Zelaya, ya que su proyecto de profunda modernización del país no respondía a sus intereses.
Los gobiernos sucesivos entregaron la soberanía de Nicaragua a la Casa Blanca, con tal de permanecer en el poder. Retomando el valiente legado de Benjamín Zeledón, quien murió en 1912 enfrentando con sus tropas a más de 800 norteamericanos y dos mil conservadores, el General Sandino se propuso expulsar a los yanquis, hasta lograrlo el primero de enero de 1933, después de casi 7 años de lucha.
Tras el triunfo del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua (EDSNN) y la salida de los marines de Estados Unidos, Sandino se dedicó a construir la paz, a partir del acuerdo firmado el 2 de febrero de 1933 con el presidente liberal Juan Bautista Sacasa.
El Convenio de Paz, firmado por Sandino y el presidente liberal Juan Bautista Sacasa, ponía fin a la lucha armada, entre otras cuestiones. Sin embargo, el presidente incumplió el acuerdo, ocasionando un enfrentamiento político con Sandino, que terminó al año siguiente asesinado a traición, por órdenes directas de Washington al jefe de la Guardia Nacional, Anastasio Somoza García.
Con la muerte de Sandino el 21 de febrero de 1934, se desató una feroz represión en contra de los campesinos sandinistas de las cooperativas de la ribera del Río Coco, Wiwilí, y en contra de los miembros del EDSNN y sus familias. Empezó el ascenso al poder de Anastasio Somoza García, jefe director de la mencionada Guardia Nacional, marcando asó el inicio de una de las más crueles y sangrientas dictaduras de Latinoamérica, la dictadura de los Somoza, que duró 45 años, hasta el 19 de julio de 1979.
La Revolución Popular Sandinista, el triunfo de un pueblo en armas
La Revolución Popular Sandinista es producto de un largo camino de lucha del pueblo nicaragüense, encabezado por el Frente Sandinista de Liberación Nacional – FSLN, fundado por Carlos Fonseca Amador, Silvio Mayorga, Faustino Ruiz, Jorge Navarro, Francisco Buitrago, José Benito Escobar, Tomás Borge, Germán Pomares Ordóñez, Pablo Úbeda “Rigoberto Cruz” y el coronel Santos López, sobreviviente del ejército de Sandino,
La lucha del FSLN se desarrolló en un contexto nacional muy complejo por casi veinte años, enfrentando a una dinastía sangrienta y opresora como la de los Somoza, que contaba con el apoyo incondicional de la administración norteamericana.
En el mes de octubre de 1977 empezó la ofensiva ininterrumpida, que casi dos años después culminaría con el glorioso 19 de julio de 1979.
El sacrificio del pueblo nicaragüense, tanto en el campo como en la ciudad, conmocionó a la comunidad internacional. La libertad fue conquistada al precio de cincuenta mil vidas, resistiendo clandestinidad, torturas, masacres y bombardeos.
Llegó el 19 de julio de 1979: a las 02:00 de la madrugada, el teniente coronel Fulgencio Largaespada, anunció el cese al fuego.
El FSLN, a la vanguardia del pueblo nicaragüense, logró derrocar a la dictadura somocista. Las imágenes de la Revolución Popular Sandinista traspasaron fronteras: los ojos del mundo estaban puestos en la victoria del pueblo nicaragüense.
El triunfo de la Revolución Popular Sandinista, dio inicio a una década de grandes transformaciones sociales, bajo la dirección del Comandante Daniel Ortega. Entre los profundos cambios que podemos destacar están la Gran Cruzada Nacional de Alfabetización, la creación de un sistema publico de salud y educación, la Reforma Agraria, las primeras elecciones libres en la historia de Nicaragua, la primera Constitución Política, el reconocimiento de la naturaleza multicultural, multiétnica y plurilingüe del estado nicaragüense, con los Estatutos de la Autonomía a la Costa Caribe, entre otros hitos.
Posteriormente se vivieron los 16 años de neoliberales, donde nos hundieron en miserias, el espíritu somocista volvía aparecer, con otra careta. Pero este pueblo glorioso estaba decidido a recuperar sus conquistas, y fue en el año 2007 que el FSLN, guiado por el Comandante Daniel Ortega, regresó al poder y el pueblo comenzó a vivir la segunda etapa de la Revolución, tiempos de restitución de derechos.
43 años de Revolución y Dignidad nacional
Han pasado 43 años de la gesta más grande del país. Nicaragua continúa y continuará viviendo en libertad, viviendo ambientes de paz, avances y logros para pueblo. Son 43 años de amor a la patria, 43 años defendiendo la soberanía de nuestra nación, ante las agresiones injerencistas norteamericanas.
Con mucha alegría y entusiasmo se prepara el pueblo, junto al Presidente Comandante Daniel Ortega y la Compañera Rosario Murillo, para conmemorar con alegría y jubilo, nuestro 43 aniversario.
Vivimos la segunda etapa de la Revolución, la segunda etapa de gobiernos sandinistas, donde el bienestar del pueblo es prioridad, donde los derechos han sido restituidos, empezando por el derecho a la salud y la educación. Hoy podemos ser testigos de muchos proyectos sociales, donde se benefician miles de familias nicaragüenses, Casas para el pueblo, Usura cero, Bono productivo, Calles para el pueblo, parques, paquete alimenticio, entre otros.
Se cumplieron los sueños del General Zeledón, del General Sandino, del Comandante Carlos Fonseca y las de miles de mujeres y hombres que entregaron su vida para una Nicaragua libre.
¡Viva el 43 aniversario de la Revolución Popular Sandinista!
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