El Banco Central de Nicaragua (BCN) ha publicado el último Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) correspondiente al mes de mayo de 2023, revelando un crecimiento significativo del 6,5% en comparación con mayo de 2022, tras registrar un 2,1% en el mes anterior. La variación acumulada enero-mayo alcanzó un 3,9%, y la tasa media anual se situó en 3,4%.
De acuerdo con la serie desestacionalizada del IMAE, se mostró un crecimiento del 1,4% con respecto al mes anterior, y un sólido aumento del 4,9% en comparación con mayo de 2022. Asimismo, en la serie de tendencia-ciclo, el IMAE mostró un crecimiento del 0,6% en relación al mes anterior y un 3,6% respecto a mayo de 2022.
El informe del BCN destaca que en la serie original del IMAE, las actividades que mostraron un mayor crecimiento fueron: hoteles y restaurantes (20,5%), energía y agua (15,0%), explotación de minas y canteras (11,2%), comercio (9,7%), construcción (7,4%), otros servicios (7,3%), transporte y comunicaciones (7,2%), e intermediación financiera y servicios conexos (6,9%), entre otros. Sin embargo, se disminuyó una disminución del 0,3% en la actividad pecuaria.
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En cuanto a las actividades primarias, el crecimiento en la agricultura fue resultado principalmente de mayores labores y producción en café y granos básicos, mientras que en la explotación de minas y canteras se necesitará a la mayor extracción de la minería metálica y no metálica. Además, el crecimiento en pesca y acuicultura se atribuyó a la mayor captura de peces y langostas, y en silvicultura y extracción de madera debido a aumentos en la extracción de troncos de madera. Por otro lado, la disminución en la actividad pecuaria se atribuyó a menor matanza porcina, exportaciones de ganado en pie y producción de leche, entre otros factores.
En la industria manufacturera, se destacará el crecimiento en la elaboración de bebidas, tabaco, derivados de petróleo, productos no metálicos y elaboración de arneses, entre otros sectores.
Finalmente, en el grupo de servicios, se aumentó el crecimiento en actividades como hoteles y restaurantes, energía y agua, comercio, otros servicios, transporte y comunicaciones, e intermediación financiera y servicios conexos, demostrando así el avance sostenido en sectores diversos de la economía nicaragüense.
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