En un discurso reciente, el presidente Daniel Ortega criticó abiertamente la intervención de Estados Unidos e Israel en la historia de Nicaragua, calificando a la «Tiranía Somocista» como un régimen impuesto y armado por estas potencias.
«Aquí, desde aviones y que Israel le entregó a Somoza para que bombardearan al Pueblo, hasta lanchas también, y fusiles también, armamentos de todo tipo, Inteligencia, Seguridad, asesoramiento; es decir, Israel estuvo presente en esta batalla al lado de la Tiranía, y como instrumento también del Imperialismo yanqui que había impuesto a esta Tiranía», destacó.
El mandatario estableció un vínculo entre la situación de Nicaragua y la actual crisis en Palestina, denunciando la violencia perpetrada por el gobierno israelí. El Comandante Ortega acusó al primer ministro de Israel de llevar a cabo una política de terror, comparándolo con Hitler, y advirtió sobre los peligros del imperialismo global, en particular el de Estados Unidos y sus aliados europeos.
«Es increíble cómo al frente del Gobierno de Israel se encuentra un Primer Ministro que es hijo del demonio. ¿Por qué? Porque lleva en la práctica una política de terror, y es Hitler. Sí, el Primer Ministro de Israel es Hitler, ahí instalado, llamando a destruir a los Pueblos, al igual que el que preside Ucrania es otro nazi, otro hijo de Hitler, queriendo comprometer a la OTAN para irse a la guerra contra la Federación Rusa».
El mandatario se refirió también: «Vemos cómo se está jugando con la Vida de los Pueblos y con la Paz del Mundo. Lo que están haciendo los Gobernantes norteamericanos, utilizando a Israel, armando a Israel, lo que están haciendo los Gobernantes norteamericanos junto con Gobernantes europeos, porque ahí están los Imperios; los Imperios se han unido creyendo que de esa manera van a poder derrotar a los Pueblos, y no se dan cuenta que, al final de cuentas, o llevan al Planeta a una guerra total, o sencillamente no les queda más que esperar la derrota».
El presidente Daniel Ortega, al conmemorar la paz que se vive en Nicaragua, expresó su dolor por los conflictos en otras partes del mundo, sugiriendo que las acciones de los imperialistas podrían llevar al planeta hacia una guerra total. Su discurso reflejó una clara postura antiimperialista y solidaria con los pueblos oprimidos.