Barricada

Leonel Rugama, del seminario a la guerrilla

El 27 de marzo de 1949, hace 74 años, nació en el Valle de Matapalos, departamento de Estelí, Leonel Rugama. Poeta, seminarista y guerrillero, se integró a la lucha revolucionaria, entregando su vida a los 20 años. El legendario valor con el que enfrentó en desigual combate  a la Guardia Somocista el 15 de enero de 1970, sigue inspirando a generaciones de militantes sandinistas.

Hemeroteca | El equipo de Barricada/Historia, en celebración al 70 aniversario del natalicio de Leonel Rugama, comparte con sus lectores uno de los poemas del guerrillero sandinista, publicado como texto inédito el 22 de marzo de 1980 en la sección “Poesía Libre”, de la versión impresa de nuestro diario.

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Poema como este nos devuelven el retrato humanizado de un joven, que antes de convertirse en un héroe, y luego en un ícono de la lucha antisomocista, fue un muchacho de su edad.

Los versos delicados de este poema de amor nos recuerdan que nuestros héroes y mártires fueron también hombres de carne y hueso, que amaban la vida, tenían sueños y esperanzas, se enamoraban.

Por eso, valoramos el sacrificio de Leonel Rugama y de los miles de hombres y mujeres que a lo largo de la historia de nuestro país, se sacrificaron con la convicción que la Revolución iba a triunfar y que otros, más adelante, seguirían luchando por los mismos ideales de libertad y justicia social.

Y negros como la última vez

Extracto de Barricada, versión impresa, sábado 22 de marzo de 1980

Sección: “Poesía Libre”, a cargo del Ministerio de Cultura

Y si no eras vos

era una muchacha que se parecía

más creo, que no eras

a pesar que tu suavísimo pelo exacto

la mismo fresca mejilla

con tu gesto de estatua rosada

y el brillo pálido

apenas dejándose ver

lo liso y blanco de los hombros descubiertos

tocando el metal

como a helado cuchillo

asomado por las primeras ventanillas

y hasta creo que escuché tu aspiración cansada

de allí, comencé a imaginarte completamente

y a pesar si eras o no

olvidando la calle

y lo que platicaba con Mario

y hasta el mandado que andaba haciendo.

Cerrar los ojos

o no ver nada aún con los ojos abiertos

construir todo tu cuerpo

con tu blusa verde clara

cubriendo tus senos

frescos

(como llanos brisados)

erguidos

y a la vista

el hondo triángulo

que forma el pecho con tus tetas

socadas por las tiras blancas del portabusto

atado en la espalda

Y con tu falda rala

la que se desliza como panada de agua

por tus caderas

y parece parte de tu cuerpo

más de tu piel estirada

que te sube por las rodillas

y si eras o no

relacionándote con el rostro igual

que vi en la ventanilla

cuando la gente se apretujaba

al dar rápidamente la vuelta

el bus por la esquina

y si no eras vos

era una muchacha que se parecía

y se componía el pelo

como sobándoselo con la mano

y el brazo sobre la ventanilla

arreglándose el bello alboroto que le hacía el viento

y moviendo lentamente la cabeza

de abajo para arriba

y como acercándose frágilmente hacia afuera

con la línea limpia de los labios

y los ojos parpadeantes

perdidos por la velocidad

pero con tu aire

y negros como la última vez.

(Leonel Rugama)

Breve perfil biográfico

Leonel Rugama nació el 27 de marzo de 1949 en el Valle de Matapalos, Estelí.

Su padre Pastor Rugama era un carpintero y su madre, Cándida Rugama, era maestra. Durante muchos años, se manejaba que la fecha de nacimiento de Leonel era el 21 de marzo de 1949; sin embargo, doña Cándida confirmó en una entrevista que se le realizó en 1989 que su hijo había nacido el 27 de marzo, debido a un error de confinación en el registro.

Durante su infancia, se crió al lado de su abuela, hasta que terminó el quinto grado. Fue entonces que se trasladó a Managua para estudiar en el Seminario Mayor, pero antes debería terminar su sexto grado en el Colegio San Ramón.

Leonel visitaba los barrios más pobres de la capital, lo que despertó en él la conciencia de un cambio que consideraba necesario, soñando un mejor futuro para los nicaragüenses y sobre todo la para la niñez.

Por eso, en 1967 estableció contacto con el Frente Sandinista de Liberación Nacional, iniciando su lucha en las montañas como guerrillero. Durante ese tiempo comenzó a escribir poesía.

Recibió órdenes de trasladarse a León, donde logró matricularse en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-León).

En cartas enviadas a su papá, le explicó que su propósito no era terminar una carrera profesional, sino más bien el hecho de aportar a la revolución, integrando el Frente Estudiantil Revolucionario (FER).

Sus primeros poemas fueron publicados en un suplemento semanal de un periódico nacional. “La tierra es un satélite de la Luna”, se ha considerado como uno de los más difundidos de la poesía latinoamericana.

Integrado en la lucha revolucionaria, Leonel Rugama junto a sus compañeros Roger Núñez Dávila y Mauricio Hernández Baldizón, fueron asesinados mientras se encontraban en una casa de seguridad del Frente Sandinista, cuando un batallón de la Guardia Nacional los emboscó iniciando así un enfrentamiento que sería transmitido en cadena nacional.

Durante el combate desigual, debido a que los jóvenes eran atacados con armamento pesado y avionetas, Leonel y sus dos compañeros entonaban el Himno Nacional de Nicaragua.

En una de las tantas veces que se les solicitaba a través de megáfonos su rendición, Leonel contestó: “¡Que se rindo tu madre!”, siendo escuchado por miles de nicaragüenses y expandiendo al planeta entero.

Su inquebrantable convicción y su inmenso valor siguen iluminando nuestros pasos.

Investigación documental y digitalización: Enmanuel Soza