Un 28 de julio de 1954 nació en Sabaneta, Venezuela, un líder mundial, un hombre con un corazón noble, solidario y profundamente comprometido con las causas de los pueblos, el Comandante Hugo Rafael Chávez Frías. Hoy escribimos recordando el natalicio de un gran revolucionario, cuyo legado permanece vivo, presente en alma, espíritu y acción en cada uno de nosotros. Chávez sigue siendo ejemplo de unidad, de solidaridad, de hermandad entre pueblos hermanos que comparten una historia y enemigo en común.
Chávez y la Unión de los Pueblos: de la Visión a la Acción
Chávez fue un fiel continuador del pensamiento de Simón Bolívar. Inspiró a millones a reencontrarse con sus raíces históricas, a comprender que la lucha por la soberanía, por la autodeterminación de los pueblos y por el multilateralismo es una lucha con profundas raíces históricas en la identidad latinoamericana.
Con Chávez, la solidaridad entre los pueblos se fortaleció y se convirtió en un principio revolucionario. Fruto de esa visión nacieron iniciativas como Petrocaribe y el ALBA-TCP. Este último significó una esperanza, una ayuda concreta y un despertar para el pueblo nicaragüense, que durante años había estado sumido en la oscuridad de los gobiernos neoliberales.
Las relaciones entre Venezuela y Nicaragua son un claro ejemplo de que el único camino posible hacia la soberanía de una nación es la solidaridad entre los pueblos. El ALBA-TCP nace en diciembre de 2004 en La Habana, Cuba, con el objetivo de alcanzar el desarrollo integral, asegurar la igualdad social y contribuir a garantizar la calidad de vida, el buen vivir, la independencia, la autodeterminación y la identidad de los pueblos. Se trata de una alianza impulsada por el Comandante Chávez, que a lo largo de los años ha demostrado ser una verdadera alternativa para América Latina y el Caribe: un modelo de integración socialista, solidario y profundamente revolucionario.
«Nos emociona profundamente ver y vivir su legado en nuestra Nicaragua bendita, y ver y vivir la hermandad con su pueblo, una hermandad que nada puede romper. Hemos estado juntos a través de todos los tiempos de esta historia reciente, la historia que despertó las llamas libertarias de nuestros pueblos, no solo en América Latina, sino en el mundo; historia reciente, tiempo histórico, tiempos históricos, y sabemos que las fuerzas de Chávez nos habita a todos y sabemos que somos capaces de dar todas las batallas desde la fuerza del espíritu, ese espíritu indómito, indomable, aguerrido, valiente, noble, bravo de nuestros pueblos que reclamamos en toda justicia nuestro derecho a vivir seguros, tranquilos, trabajando y prosperando en nuestra tierra, nuestra tierra sagrada». Compañera Rosario Murillo, Copresidenta de Nicaragua, 5 de marzo de 2025.
Chávez: Comandante de los Pueblos
Chávez significó un despertar para los pueblos de América Latina y del mundo entero. Era un hombre visionario, con una mirada cálida, tierna y con una claridad ideológica que va más allá. Un hombre que todo lo que venía en él, con él y detrás de él, era, y sigue siendo, Revolución.
Su extenso legado debe vivirse y defenderse día a día. Ese legado debe estar presente en nuestras aulas de clase, en nuestros trabajos, en los barrios, en las universidades y en cada espacio donde la juventud Revolucionaria y Evolucionaria nos convertimos en protagonista del cambio.
Chávez es el corazón palpitante de todos los pueblos del mundo, es el Comandante de los Pueblos. Es de esos hombres que nunca muere, que trasciende su tiempo para convertirse en un símbolo eterno de lucha y resistencia. Chávez es, sin duda, uno de los imprescindibles.
“Porque Chávez luchó por los Pueblos, luchó por América, luchó por la Humanidad; luchó por la Paz, luchó por la Justicia. Y hoy más que nunca le reafirmamos, como le hemos reafirmado, a Sandino, a Bolívar, a nuestros Héroes y Mártires, que seguiremos luchando por la Paz, por la Justicia, por la Libertad, ¡y por la Soberanía de nuestros Pueblos!” Comandante Daniel Ortega, Copresidente de Nicaragua, 5 de marzo de 2014.
Como jóvenes protagonistas de los nuevos tiempos y victorias, tenemos que asumir el compromiso de conocer, defender y honrar el legado que nos deja este heroico hombre. Su pensamiento, su historia y su ejemplo siguen inspirando a miles de jóvenes alrededor del continente. Chávez es la viva representación de la rebeldía frente a las injusticias, frente a las injerencias del imperialismo capitalista.
Sus discursos firmes y visionarios señalaban con claridad la necesidad de construir un mundo multipolar, más justo, más humano, un mundo donde abunde la solidaridad, el respeto y la igualdad entre los pueblos, un mundo donde todos seamos hermanos.Hoy, al recordar el natalicio del Comandante Chávez, reafirmamos nuestro compromiso con su legado, con sus sueños, con su causa.
Chávez vive en cada joven estudiante, en cada campesino que trabaja su tierra, en cada trabajador que aporta al desarrollo de su país, en cada pueblo que defiende su Dignidad, en cada Revolución que florece desde el amor y la conciencia.
